El aumento se produjo tanto en bienes como en servicios, y los gastos en vehículos de motor y repuestos lideraron el crecimiento.
El gasto del consumidor estadounidense aumentó sólidamente en julio, lo que sugiere que la economía se mantuvo en terreno más firme a principios del tercer trimestre y contrarresta un recorte de la tasa de interés de medio punto porcentual por parte de la Reserva Federal el próximo mes.